Si no me equivoco, uno de los principios básicos del libertarismo es el que dice que nuestro cuerpo —nuestro organismo físico— es literalmente nuestra propiedad como individuos. Podemos hacer con él lo que deseemos —siempre que no lo usemos para coaccionar la libertad de otros— hasta el extremo de que podemos dañarlo o destruirlo si así lo deseamos. Por esto, el libertarismo critica el hecho de que las leyes obliguen a que sea protegida la integridad física de cada persona, tanto si esta quiere protegerla como si no quiere —por ejemplo, están en contra de la obligación legal de ponerse casco al circular con moto.
Bien, yo estoy en desacuerdo con este principio del libertarismo, pues de hecho lo considero empíricamente erróneo, lógicamente contradictorio y, además, inmoral.
Es empíricamente erróneo porque no hay diferencia real entre nosotros mismos y nuestro cuerpo. No es que nosotros tengamos un cuerpo, sino que somos un cuerpo. Somos un ente biológico con capacidad de sentir. A no ser que postulemos algún tipo de entidad espiritual que controla el cuerpo —algo que carece de cualquier evidencia que lo sostenga— entonces tendremos que aceptar que nuestra condición de individuos reside en nuestro cuerpo. Como no hay diferencia esencial entre nuestro cuerpo y nosotros mismos, resulta absurdo que nuestro cuerpo sea considerado "nuestra" propiedad. El concepto de propiedad implica que un sujeto posee un objeto. Pero no podemos ser legítimamente poseídos en propiedad por nadie porque no somos objetos, sino que somos sujetos —somos personas. El cuerpo de una persona es parte integrante de su personalidad; no de su propiedad.
Es lógicamente contradictorio porque si el fundamento básico de la moralidad es la libertad del individuo para autodeterminarse, entonces resulta contradictorio afirmar que es lícito el hecho de dañarnos o destruirnos a nosotros mismos —ya fuera intencionadamente o por negligencia— puesto que ese hecho violaría nuestra propia capacidad para autodeterminarnos. Resulta absurdo señalar que debemos respetar la autodeterminación del individuo y al mismo tiempo aceptar que esa autodeterminación puede ser usada para destruirse a sí misma. Una doctrina que parte de la libertad del individuo para autodeterminarse y decidir sobre su vida no puede servir para destruir deliberadamente esa misma libertad.
Es inmoral porque si la doctrina del libertarismo tuviera una base racional entonces tendría que aceptar la lógica y el principio de igualdad que está basado en el principio lógico de identidad [A=A]. Esto significa que si consideramos que todo individuo tiene derecho a vivir libremente su propia vida mientras no viole la libertad individual de los individuos, entonces por la misma razón estamos obligados a respetar ese derecho también en nosotros mismos. Discriminarnos a nosotros mismos del respeto básico que todo individuo merece sería una flagrante violación del principio de igualdad.
Por todo esto considero que el libertarismo es una perversión del concepto de libertad; al igual que el igualitarismo es una perversión del concepto de igualdad y el bienestarismo una perversión del concepto de bienestar.
Por todo esto considero que el libertarismo es una perversión del concepto de libertad; al igual que el igualitarismo es una perversión del concepto de igualdad y el bienestarismo una perversión del concepto de bienestar.
Vamos a suponer una serie de cosas: fumar, beber alcohol, las carreras de automóviles, los deportes de riesgo, el uso de combustibles fósiles, escuchar música por encima de determinados decibelios, comer bollicaos,......
ResponderEliminarVamos a suponer que está demostrado que estas actividades dañan o tienen la posibilidad de dañar a los individuos que las realizan o incluso las observan.
¿Es moralmente aceptable que el Estado prohiba estas actividades porque dañan al individo? ¿Es moralmente aceptable que el Estado decida lo que es bueno o es malo para las personas? Por ejemplo, comer hamburguesas en un macdonal o beber leche de vaca está científicamente demostrado que es perjudicial para la salud humana, sin embargo, el Estado obvia las evidencias de estos perjuicios en loor de otros intereses y decide que es sanísimo hacerlo.
Un saludo.
Demasiadas suposiciones.
EliminarPara empezar; no es lo mismo dañar que la posibilidad de dañar. Son dos categorías diferentes. No creo que haya nada en el mundo que no tenga la posbilidad de dañar; por muy leve y accidental que pueda ser ese daño. Pero esto es muy diferente de aquellas actividades que tengan la intención deliberada de dañar. En este caso, el Estado sí debería actuar para evitar todas aquellas acciones que sean deliberadamente dañinas.
Si no diferenciamos claramente entre lo intrínsecamente dañino por intención y lo meramente dañino por mera posibilidad (es decir, todo) entonces no vamos a ningún sitio.
El Estado no debería decidir lo que es bueno o malo. Eso sólo lo hace un Estado totalitario. Los que toman decisiones son las personas normales o los expertos. El Estado simplemente pone los medios para proteger o fomentar las decisiones que ha tomado cada individuo, la mayoría de la sociedad o los consejos de los expertos. El Estado jamás debería tomar ninguna decisión que no está directamente avalada por los ciudadanos o los especialistas; según corresponda.
De todos modos, yo considero que la existencia del Estado es moralmente legítima y que su función principal es la de proteger los derechos de los individuos. Lo creo así porque los derechos morales no son fruto del acuerdo (no son convencionales) ni dependen de la voluntad; sino que son principios objetivos. Por tanto, los individuos tienen derechos inalienables que deben ser respetados independientemente de cualquier otro criterio.
No está demostrado que nada de eso que mencionas sea perjudicial para la salud humana. No sé de dónde sacas eso. Para algunos individuos pueden ser perjudiciales; pero para otros no. De la misma manera que para algunos individuos los plátanos o las nueces son tóxicos (por alergia) pero no lo son para la gran mayoría de la humanidad. Depende de la constitución de su organismo; de la composición de lo que ingieren; o de la frecuencia de sus hábitos; entre otras variables.
Para quienes sí son realmente perjudiciales es para los animales que son explotados para conseguir carne, lácteos y otros productos de origen animal. Estos productos sí que implican causar un daño intencionado a esos animales.
Lo que el Estado debe hacer principalmente es proteger los derechos individuales. Ésta es su función y su legitimidad moral. El Estado sólo debe intervenir cuando hay actividades que implican lesionar esos derechos. La cuestión, como ya señalé en el texto, es que uno mismo no puede tener derecho a lesionar sus propios derechos.
Luego el estado no debería meterse en si conduzco con el cinturón o en si me pongo el casco.
EliminarCreo que está demostrado que fumar o comer bollería industrial es perjudicial para la salud, no es que tenga posibilidad de ser dañino, lo es.
Creo que para defender los derechos deberían estar los tribunales de justicia, no soy un experto en el asunto, pero que existan tribunales de justicia y leyes no implica la existencia de un Estado. Claramente todos los estados que existen y han existido no están para defender derechos individuales de todos los individuos, existen para defender los privilegios de unos pocos cercenando la libertad de la mayoría. No digo que esto tenga que ser así siempre, sólo digo que ha sido así en todos los que han existido hasta el dia de hoy. Todas las guerras, expolios, genocidios, casi toda la miseria que hay en el mundo ha sólo puede explicarse por la existencia del Estado.
Seguramente habría violencia sin estados, sí, pero la escala sería mucho menor, no creo que sea ni siquiera comparable.
La función que atribuyes al estado de proteger los derechos individuales, creo, humildemente, que deberían hacerla los tribunales, la naturaleza del Estado es expansiva, el uso de la fuerza es tan tentador, que inevitablemente acaba usándose para abusar de la mayoría de los individuos en favor de una minoría. Me gustaría no tener razón, pero a las pruebas me remito.
A mí me parece que el Estado sí debería meterse en si te pones el cinturón o el casco. Por la sencilla razón de que conducir no es una actividad puramente individual sino algo que haces dentro de un contexto colectivo, en implicación con otras personas, y no al no ponerte el cinturón pones en riesgo innecesariamente también su integridad física, además de la tuya.
EliminarAparte de que no veo que el cinturón o el casco conlleven ninguna clase de perjuicio. Sólo conlleva ventajas para todos, sobre todo para el conductor. Las quejas sobre este punto me parecen absurdas. Es como decir que no se debe obligar a alguien a llevar paracaidas cuando salte de un avión. No se puede permitir que alguien atente deliberadamente o por negligencia contra su propia vida. Los derechos no dependen del humor con el que te levantas cada día.
Ni el tabaco ni la bollería industrial son productos que tengan la intención de dañar la salud de nadie. Que su consumo pueda tener consecuencias perjudiciales no lo diferencia de cualquier otro producto. Incluso el consumo de agua puede ser tóxico si se sobrepasa cierta cantidad. Lo que está mal es coaccionar o forzar a otras personas a consumir dichos productos. Lo que está mal es incluir en esos productos sustancias que estén catalogadas como tóxicas en niveles superiores al riesgo para la salud humana.
Para defender los derechos es necesaria la existencia de un Estado porque esa defensa es moralmente obligada y no puede depender de la capacidad económica de un individuo para financiar una institución privada que los proteja frente los intentos de vulnerarlos. Respetar los derechos morales es una obligación por nuestra parte, como agentes morales que somos, y debemos asegurar las condiciones que permitan defender esos derechos en un contexto universal.
Echarle la culpa al Estado de la existencia de guerras, expolios, genocidios o miseria me parece un delirio. No hay ninguna conexión causal entre la existencia del Estado y la aparición de dichos fenómenos. Históricamente se puede demostrar que la violencia y la miseria existen muchísimo antes de que nada parecido al Estado hubiera surgido. Además, en todo caso, la existencia y expansión del Estado va acorde con el progreso de civilización de la humanidad. O sea que yo diría que la realidad es justo al contrario de lo que tú dices.
El deber de proteger los derechos individuales es precisamente la legitimidad que fundamenta la existencia el Estado. Porque la protección de los derechos morales no puede depender de la capacidad personal de cada uno para protegerlos sino que deben ser igualmente protegidos frente a las injerencias que vulneren dichos derechos
Como dijiste en el primer post, no es lo mismo dañar que la posibilidad de dañar. Me parece cierto. Que yo decida conducir un coche sin tener puesto el cinturón, no me daña. Decir lo contrario seria absurdo. Si no me daña, el estado no tiene por qué meterse en si me pongo o no me pongo el cinturón. Además, decidir ponérmelo es algo que solo tiene implicaciones individuales, no veo como puede un conductor poner en riesgo la integridad de un peatón por el mero hecho de no ponerse el cinturón, esta idea es de traca. También me gustaría que me explicases con más detalle como el hecho de no llevar casco en una moto o en una bicicleta pone en riesgo al resto del colectivo que utiliza las vias públicas.
EliminarEl hecho de que conlleve ventajas su uso para el individuo es irrelevante, ciertamente realizar media hora de ejercicio diaria tiene muchas ventajas desde el punto de vista de la salud y de momento, no veo al Estado con ganas de convertirlo en obligatorio. Que una persona como tú confunta un derecho con una obligación me parece absurdo.
No hace mucho, el Estado permitía conducir a 120 km/h por las autovías, después prohibió conducir a más de 100, posteriormente volvió a permitir ir a 120, es curioso que un país entero sí deba estar pendiente del humor con el que se levanta un señor ministro.
En cuanto al tabaco, alcohol y la bolleria industrial, efectivamente, su consumo no implica la intención de dañar a nadie, al igual que el consumo de heroína y cocaína. Es otro absurdo que el Estado prohíba unas y permita otras, pero admito que puedo estar equivocado, y partiendo de tu premisa de que no es lo mismo dañar que la posibilidad de dañar, me gustaría que me explicases la diferencia.
Decir que la defensa de los derechos individuales implica la existencia de un Estado es faltar a la verdar, es el Estado el que coacciona a los individuos para conseguir su propio beneficio. De hecho, son los Tribunales de Justicia los que deberían proteger los intereses del individuo de otro individuo e incluso del propio Estado. Dar por hecho que Estado y Justicia es lo mismo es dogmatizar en exceso, bajo mi punto de vista, ya que estaremos de acuerdo, en que, sólo un tribunal de justicia puede protegerme de los abusos del Estado.
En cuanto al tema de las guerras o genocidios, también me gustaría que me dieses algún detalle. Decir que no hay ninguna conexión entre la existencia del Estado y una guerra es decir que el Estado no recluta a sus ciudadanos y los instruye en el uso de las armas y los usa invadir y guerrear con gente de otro país. Es probable que sin la existencia de un Estado y un ejército poderoso, Pol Pot hubiese matado unos cuantos millones de camboyanos con sus propias manos, o Stalin, sin el Estado ruso y su aparato represor, hubiese metido en cintura él sólo a unos cuantos millones de rusos, o Mao, o Hitler, o incluso Julio Cesar o Carlo Magno. La verdad es que tengo interés en que entres en detalle para explicar como pudo Leopoldo II de Bélgica exterminar a más de 10 millones de congoleños sin la existencia de un Estado. La realidad es posible que sea al contrario de como yo digo, pero sin duda debe ser tu realidad y sólo en tu mente. Las personas que han vivido y viven oprimidas durante miles años por el Estado segurmente piensen otra cosa. Sólo en el siglo XX, las guerras causaron más de 100 millones de muertes. Que digas que el Estado no tiene nada que ver es una cosa, y que lo argumentes es otra muy distinta.
Lo que tú dices que fundamenta la existencia del Estado, en realidad lo que legitima es a los jueces y tribunales de Justicia, que deben ser independientes y defender a los individuos de los abusos en los que incurra el Estado. No es necesaria la existencia de ningún estado para defender los derechos de las personas, sólo hace falta echar la vista atrás a los últimos 5 o 6000 años de historia.
Pero no puedes elegir el argumento que mejor te convenga e ignorar los demás. Eso es racionalizar; no razonar. Aquí venimos a razonar desde la base, sin prejuicios y con argumentos lógicos. Lo que tú haces es partir de una postura previa e intentas buscar datos y argumentos que supuestamente avalen tu posición.
EliminarNo te das cuenta de que conducir por carretera no es una actividad privada. Es un acto que forma parte de un contexto específicos que es colectivo, social, gestionado directamente por el Estado, que se tiene que ajustar a unas reglas que protejan los derechos de los implicados en esa actividad. Es por esto que se obliga el uso de determinadas medidas de seguridad.
Al no llevar casco puedes ser golpeado en la cabeza por cualquier objeto y dejarte aturdido. Al quedar aturdido, o incluso consciente, pierdes el control de tu vehículo y pones en peligro al resto de usarios y a ti mismo. Esto se puede evitar fácilmente llevando casco. Que yo tenga que explicarte este punto demuestra que no te has parado un segundo a reflexionar sobre ello ni a leerte las argumentaciones sobre seguridad vial.
El ejercicio no está obligado por ley porque la gestión de la salud tu cuerpo es un ámbito privado. Aunque sea privado no significa que esté fuera de la ética. Las agresiones deliberadas contra uno mismo son inmorales y también deben estar sancionadas para evitarlas.
Yo no confundo derecho con obligación. Ni he dicho que sean idénticos. Pero existe una relación esencial entre ambas nociones. Para empezar, un derecho implica una obligación de respetarlo. Todo derecho implica una obligación de respetarlo por parte de quienes son responsables de sus actos.
Como ya señalé anteriormente, no creo que los políticos deban decidir nada. Ellos sólo deben gestionar la administración pública siguiendo la voluntad de los ciudadanos o las conclusiones de los expertos. Los políticos son representantes de los ciudadanos; no sus jefes.
Yo no estoy a favor de que el Estado prohíba las drogas. Creo que el Estado sólo debe prohibir vender aquellas sustancias que sean puramente venenos. Pero no veo razón para prohibir una sustancia cuya finalidad es provocar placer o bienestar o felicidad. Considero que el Estado sólo debería regular esa actividad para asegurar la salubridad mínima o la limitación del consumo a personas adultas. El Estado debe prohibir toda coacción o explotación de los individuos; pero si no hay violencia en principio no es justo prohibir ninguna actividad libre entre personas.
Eres tú quien falta a la verdad cuando dices que el Estado coacciona a los individuos para su propio beneficio. Ésa no es la naturaleza ni la función del Estado. El Estado sirve y existe para proteger los derechos de los individuos. El fundamento del Estado es la imparcialidad y la objetividad de sus principios. Tú hablas del Estado como si fuera un grupo de gente; cuando el Estado es una institución. Y confundes el comportamiento erróneo de determinadas personas que circunstancialmente trabajen en el Estado con lo que es el sentido propio del Estado.
Yo creo que es evidente que tú confundes el Estado con el uso fraudulento que alguien ha hecho del Estado. Es como si me dijeras que la existencia de los tenedores es inmoral porque alguien ha usado tenedores para agredir a personas. Ésa no es la función de los tenedores. Del mismo modo, la función del Estado no es la agredir a la gente en ninguna forma o grado. Ésa no es su naturaleza ni propósito. Como ya te he señalado, el Estado existe para proteger los derechos individuales de forma universal e imparcial.
Yo hablo del Estado desde la perspectiva racional, democrática y liberal; claro. La idea que el totalitarismo tiene del Estado se parece sólo en el nombre. Cuando tú mencionas personajes como Stalin, Hitler y similares, me hablas de dictatores que conviertieron el Estado en una organización opresiva más parecida a una secta que a lo que entendemos por un Estado.
En realidad, no hablas del Estado sino del ejército. Es verdad que el ejército ha sido parte integrante de muchos Estados. Pero hay muchos Estados que carecen de ejército. No lo considero un elemento esencial. Para tareas defensivas ya está la policía y la milicia. Los ejércitos existen generalmente como cuerpos de agresión y conquista. Y esto no tiene nada que ver con proteger los derechos individuales.
EliminarNo has argumentado que la existencia del Estado vaya asociada a las guerras ni al resto de hechos desafortunados que mencionaste anteriormente. Simplemente señalas casos puntuales de Estados que participaron en guerras. Pero, aparte de que la función bélica no es inherente al Estado, hay muchos Estados que nunca han participado en guerras. Y si indagamos un poco vemos en realidad que todos esos conflictos han sucedido por causas ideológicas que no tienen relación con el papel propio del Estado. También podemos ver que las guerras tienen mucho que ver con la la existencia de instintos agresivos y tribales que están enraizados en nuestra constitución biológica, tal y como Konrad Lorenz y otros biológos han argumentado.
Tus acusaciones sobre el Estado además de indemostradas; evidencian una tremenda confusión de análisis en el uso de categorías y el esclarecimiento de las causas de los hechos.
Steven Pinker es un académico que ha estudiado profusamente sobre el proceso de civilización de la humanidad y una de sus tesis principales consiste en señalar que el Estado es la institución que, al contrario de lo que tú dices, ha servido para contribuir notablemente a la reducción de la violencia en el mundo:
http://www.ilustracionliberal.com/54/pinker-y-la-violencia-juan-pablo-arenas.html
Los jueces y tribunales son precisamente uno de los elementos inherentes del Estado, junto con los legisladores y la policía, y para que sean independientes no pueden depender económicamente de la financiación privada. Es necesario que se sostengan a base de impuestos que aseguren su independencia de los poderes económicos y de ese modo la justicia sea universal e igual para todos. Por eso el Estado como institución es necesario para proteger los derechos individuales frente a los abusos. También frente a los abusos cometidos por integrantes del funcionariado o de cargos políticos.
Yo no niego que dentro del Estado se produzcan abusos. En cambio, tú hablas de las iniciativas privadas como si fueran actividades perfectas en las que no se pudieran producir abusos. Los abusos son consecuencia de los defectos y la corrupcción humana; no del Estado como institución. El Estado precisamente surge para combatir estos errores a través de la imparcialidad de una institución universal que no permita la opresión de unos individuos sobre otros o de un grupo sobre otro.
Si revisamos la Historia precisamente lo que vemos es que la consolidación del Estado va en consonancia con favorecer el proceso de civilización de la humanidad. La ausencia o disolución del Estado es siempre sinónimo de barbarie:
http://lecturasporcinas.blogspot.com.es/2014/10/los-angeles-que-llevamos-dentro-2012.html
En mi opinión la refutación no es válida porque se basa de una premisa equivocada:
ResponderEliminar"Si no me equivoco, uno de los principios básicos del libertarismo es el de que que nuestro cuerpo - nuestro organismo físico - es literalmente nuestra propiedad como individuos."
La refutación podría ser igualmente válida a nivel interno aunque la premisa supuestamente no correspondiera a la doctrina del libertarismo. Sería un problema de correspondencia; no de validez. Además, es un hecho que hay personas que defienden esa idea, aparte del nombre de que le atribuyan.
EliminarDe todos modos, yo considero que la premisa sí corresponda exactamente con uno de los principios fundamentales del libertarismo y se encuentra repetidamente en los escritos de todos su defensores. Lo que sugieres ni siquiera tiene sentido para mí, después de haber estado leyendo durante años artículos de autores libertaristas repitiendo insistentemente esa idea.
Afirmar que "no hay diferencia real entre nosotros mismos y nuestro cuerpo" es conlleva implícita una cosmovisión monista de la realidad que no separa entre el "mundo material" y el "mundo de la experiencia". Este planteamiento monista sólo lo considero correcto cuando el único mundo real es el de la experiencia, y todo lo que llamamos materia, es en realidad experiencia subjetiva ¿es este el caso?
ResponderEliminarBueno, explícame qué diferencia cualitativa hay entre nosotros y nuestro cuerpo que establezca que somos entidades diferentes y no distintos aspectos de una misma entidad, tal y como he razonado.
EliminarNo me interesa adscribirme a ninguna doctrina ni asumir ningún planteamiento previo. Solo me interesa razonar e investigar, de acuerdo a la lógica y la evidencia empírica.
Buenas, que yo sepa uno de los principios básicos del libertarismo es que cada individuo tiene derecho a acometer las acciones que desee mientras no supongan una agresión a otro individuo.
ResponderEliminarPienso que vivir es un derecho, pero no una obligación y que la decisión última de qué hacemos con nuestras vidas reside en nosotros mismos. Supongo que estarás a favor de que se legisle en contra del suicidio asistido, ¿no?
Si ése es en efecto uno de los principios del libertarismo y asumimos ese principio como válido, entonces, por lógica, un individuo no puede agredirse a sí mismo. Aplicar ese principio con un mínimo de coherencia implica que uno puede hacer lo que desee mientras no suponga agredirse a sí mismo. Los libertaristas no suelen aceptar esto. Porque el problema de fondo es que no aceptan la lógica. Y si uno no acepta la lógica entonces quiere decir que su postura se basa en hacer lo que le dé la gana y punto, y ese voluntarismo se disfraza con máximas que suenen bien pero que en el fondo no son más que lemas huecos.
EliminarEl problema de fondo con el libertarismo, como sucede con todas las doctrinas e ideologías, es que no puede justificar los principios sobre los que se asienta. En última instancia son arbitrarios. Podrían ser esos o podrían ser cualesquiera otros. ¿Por qué esos y no otros completamente diferentes? Al final, todo se basa en el mero capricho de cada uno. O se intentan justificaciones basadas en falacias, como decir que eso es "lo natural" (falacia naturalista).
Don Luis, entiendo su postura pero no la comparto. Si según usted : ¨Una doctrina que parte de la libertad del individuo para autodeterminarse y decidir sobre su vida no puede servir para destruir deliberadamente esa misma libertad¨ revela que no entiende propiamente el significado de esa libertad. Entienda el cuerpo como propiedad o no, el principio liberal reside en utilizar tu cuerpo con los fines que estimes oportunos sin dañar al ajeno, y su propia frase entra en contradicción. Utilizar tu libertad para restringirla forma parte precisamente de ese principio, del cual el Estado se erije con el derecho de arrebatartelo o de legislar sobre el.
ResponderEliminar1- Si usted se encierra en un monasterio durante 50 años de su vida, obviamente restringe su libertad ¿Entra en contradicción para un liberal?
2- El que vende un órgano de su cuerpo a otro de mutuo acuerdo y sin coacciones.
¿Entra en contradicción para un liberal?
3- La prostituta que ¨vende¨ su cuerpo a cambio de una remuneración económica.
¿Entra en contradicción para un liberal?
Decidir sobre tu vida SI puede servir para restringir tu libertad siempre y cuando sea tu decisión, y no la de otro o la del Estado sobre ti.
La segunda contradicción es la siguiente: ¨Esto significa que si consideramos que todo individuo tiene derecho a vivir libremente su propia vida mientras no viole la libertad individual, entonces por la misma razón estamos obligados a respetar ese derecho también en nosotros mismos¨.
¿Cómo es posible que actuando en función de nuestros impulsos podamos violar nuestra propia libertad individual? Es un sin sentido.
Y tercera contradicción: ¨Discriminarnos a nosotros mismos del respeto básico que todo individuo merece sería una flagrante violación del principio de igualdad¨.
Precisamente la libertad implica desigualdad. Sólo a través de la coacción de unos sobre otros puedes conseguir ¨cierta ¨ igualdad. Y el respeto básico que todo individuo merece depende de ti y de nadie más. Si tu vendes tu cuerpo a otro a mi me puede parecer que tu no te respetas a ti mismo… ¿y? ¿He de obligarte yo a que te comportes en función de mis cánones y que te respetes a tí mismo en función de mi consideración?
Yo no creo que en verdad hayas entendido mi postura. En este artículo ni siquiera expongo mi postura; sino un conciso análisis argumentativo sobre el principio que sostiene una determinada doctrina. Deducir mi postura de este análisis me parece una proeza excesiva. Quizás tú supones cuál se mi postura; pero es sólo eso: una suposición.
EliminarPara empezar; decirme que, supuestamente, yo no entiendo algo no es un argumento. Así que empezamos mal con esas alusiones.
Razonar si el cuerpo es, o no es, una propiedad se trata de un elemento clave y central en esta cuestión. Y no algo que podamos ignorar si queremos dialogar.
Me parece que estarías confundiendo el libertarismo con el liberalismo. Puede que sus nombres se parezcan pero son dos cosas distintas. El libertarismo es una versión del anarquismo individualista. Sus defensores se autodenominan "libertarios" y por eso lo llamo así. Es un tipo de anarquismo; no es liberalismo. El liberalismo y el anarquismo son doctrinas categorialmente diferentes. Aunque estos libertarios alegan defender "la libertad" y hablan de "liberalismo" para referirse a su doctrina, la cual sin embargo no corresponde con el cuerpo ideológico al que el término liberalismo ha hecho referencia durante el siglo XIX y el XX. Ésta probablemente sea una de las confusiones más graves en filosofía política que yo haya visto jamás; dado que el libertarismo contradice punto por punto todo lo defendido tradicionalmente por el liberalismo desde la Ilustración hasta ahora. Pero no voy a extenderme más sobre este punto de momento.
Aclarado esto, respondo a tus objeciones, para que veas que yo no estoy criticando el liberalismo.
Una persona tiene derecho a decidir libremente si quiere vivir en un monasterio. Pero no tiene derecho a otorgar ese poder de decisión a otra persona; ni tampoco otorgar un poder a otra persona para que destruya su capacidad de decisión. Un derecho no puede servir para vulnerar ese mismo derecho. Esto sería una contradicción; y la contradicción no es lógicamente válida.
Por tanto, que alguien decida vivir enclaustrado en un monasterio por propia voluntad no "restringe" ninguna libertad. Es igual de libre que siempre. Sólo restringe su ámbito de movimiento a un lugar, exactamente del mismo modo que todos limitamos nuestros movimientos a un área determinado (casa, trabajo, lugar de ocio,...).
Nadie puede verder su cuerpo, porque el cuerpo no es una propiedad. El liberalismo jamás ha defendido tal cosa (no confundir con el libertarismo/anarquismo) sino todo lo contrario. Me remito a la argumentación de este ensayo.
La prostituta no "vende" su cuerpo. Lo que vende es un servicio. Para ese servicio emplea su cuerpo, obviamente, del mismo modo que cualquier trabajo requiere emplear el cuerpo. No existe otra forma de actuar en el mundo que no sea corporalmente.
Estaría bien que utilizáramos los términos apropiadamente y no metafóricamente, porque de lo contrario resulta imposible entenderse.
EliminarNo hay ni una sola contradicción en nada de lo que argumento. Lo que sí es una flagrante contradicción es defender que el individuo posee derechos y luego defender que el individuo tiene supuestamente el derecho a no tener derechos y que puede destruir sus derechos y su individualidad. Esto sí que es radicalmente absurdo.
Existen muchos motivos que pueden llevar a alguien a atentar contra sí mismo; contra su propia existencia, bienestar o libertad. Se me ocurren varios: la enajenación mental; el engaño, la adoctrinación ideológica. Es posible que por locura, estafa o sugestión mental un individuo decida atentar contra sí mismo.
La cuestión de fondo es que el respeto por el individuo no depende de la voluntad. Es al contrario: hay que respetar la voluntad del individuo como consecuencia del respeto que merece el individuo como tal. Por eso la voluntad está limitada a la ética, es decir, al respeto por el valor íntrinseco del individuo. Pensar lo contrario sería voluntarismo (es decir, que la voluntad es fundamento y no tiene límites) pero el voluntarismo es un dogma, una petición de principio, y no una razón o principio lógico.
Hablo del individuo pero igualmente podría decir persona o sujeto; porque en este contexto son sinónimos.
La libertad no implica desigualdad. Todo lo contrario. La libertad implica que todos sean reconocidos igualmente libres. Libertad e igualdad son dos principios complementarios.
La igualdad es un hecho objetivo; no es un estado de cosas que podemos alterar a voluntad. (La igualdad es un concepto distinto al de equidad o al de redistribución). Somos iguales en el hecho de ser sujetos, individuos. Y por el hecho de ser sujetos poseemos un valor intrínseco y tenemos una serie de intereses comunes. Podemos reconocer esto, o no reconocerlo, pero su existencia no depende de la voluntad.
Por último, pienso que deberíamos tener claro que si no usamos los términos en el mismo sentido no es posible el debate. También que si no tenemos como referente objetivo a la lógica y la evidencia empírica, tampoco es posible el diálogo. Porque al final todo se reduce a defender lo que a cada uno le guste o le convenga. Y eso es como entrar en una discusión sobre si es mejor el sabor dulce que el sabor salado, o cual de los dos el sabor correcto. No tiene sentido.
El libertarismo afirma (de hecho es un principio fundamental) que las personas SÍ pueden ser poseídas por otras personas (como el esclavismo demuestra) y que la única forma legítima de posesión, a este respecto, es la posesión de uno mismo. Si, empíricamente, otras personas (sujetos) pueden poseerme a mí (sujeto) como esclavo, entonces yo también puedo poseerme a mí mismo (no hay imposibilidad empírica, sino todo lo contrario) y si yo fundamento mi ética en la maximización de mi libertad negativa, entonces es lo más coherente del mundo el que lo ético sea, precisamente, que yo no deba ser esclavo de nadie ni nada exterior a mí, i.e. que en todo caso yo pueda y deba ser el único dueño de mí mismo.
ResponderEliminarNo es cierto que el libertarismo tenga por principio ético, ni se sigue de ninguno de sus principios, que yo sepa, que cada cual deba actuar de forma que garantice o maximice su capacidad de actuar libremente en el futuro. En todo caso, uno debe actuar de forma que no perjudique las libertades de otros. En este sentido el libertarismo considera legítima (con toda coherencia) que uno mismo dañe su integridad y, en general, disponga de su vida como prefiera, aunque obviamente cualquier pensador libertario (y cualquier ser humano) considerará una estupidez el que uno atente contra sí mismo, salvo que tenga inclinaciones masoquitas.
En resumen: no es cierto que el libertarismo afirme que cada cual tenga el deber de vivir libremente (o garantizar su libertad) y, por lo tanto, ni se da contradicción lógica alguna, ni se da imposibilidad empírica, sino todo lo contrario. La afirmación de que las personas/cuerpo, por ser sujetos, no pueden ser poseídas por otros sujetos es, verdaderamente y a todas luces, una afirmación patentemente falsa.
Bueno, afirmar algo no es lo mismo que demostrarlo. Todo lo que afirme el libertarismo tendrá que demostrarlo con datos y razonamientos. El simple hecho de que afirme algo no lo hace válido.
EliminarLa posesión a la que tú refieres es empírica. Pero que se produzca una posesión material no significa que esa posesión sea justificada o legítima desde el punto de vista moral. El mero hecho de hacer algo o de poder hacer algo no implica que ese algo sea moralmente correcto o que esté bien.
Un sujeto no puede legítimamente poseer a otro sujeto. Puede dominarlo o someterlo empíricamente, claro, pero esta acción es inmoral porque viola los principios de igualdad y de valor intrínseco del individuo. Principios basados a su vez en la lógica; en el principio de identidad.
Ahora, desde el punto de vista empírico, ¿cómo se puede poseer uno a sí mismo? Eso no tiene sentido siquiera; a no ser que se use el lenguaje en sentido metafórico, retórico. ¿Como uno puede ser el propietario y ser la propiedad que posee al mismo tiempo? Eso es lógicamente y materialmente imposible. Es un absurdo. Es como decir que uno puede ver y verse a sí mismo al mismo tiempo. Esto es imposible. No podemos mirarnos a nosotros mismos. Podemos ver nuestra imagen o reflejo; eso sí; pero no podemos dirigir nuestra vista sobre nuestra misma vista. Del mismo modo, no podemos ser propietarios de nosotros mismos porque para eso sería necesario dividirnos en dos entidades: propietario y propiedad.
Esa absurda idea de que "nos poseemos" a nosotros mismos procede del prejuicio del dualismo que dividía a la persona en dos entidades singulares: alma y cuerpo. Así, el alma poseía al cuerpo temporalmente. Pero esta teoría es una pura fantasía y no se sostiene ante las evidencias.
En definitiva: que unos individuos puedan poseer a otros no implica que se puedan materialmente poseer a sí mismos. Esto es una imposibilidad tanto lógica como empírica.
Si tú fundamentas tu ética en "la maximización de la la libertad negativa" la estás fundamentando dogmáticamente. Tendrías que aportar un razonamiento objetivo que justifique ese fundamento o de lo contrario sería tan arbitrario como que alguien fundamente su ética en la supremacía de la raza aria.
Es una contradicción postular que se debe respetar la libertad "de otros individuos" pero que no se debe respetar la libertad propia. Eso es una discriminación injustificada. Uno mismo es un individuo, igual que los otros. La libertad propia es la misma libertad que la libertad de otros. ¿Por qué no debería, por tanto, uno mismo respetar su propia libertad? El libertarismo puede postular todos los principios que considere oportunos, pero como mínimo tiene que respetar la lógica interna que se derive de esos principios y la coherencia entre ellos. De lo contrario al final su verdadero principio se podría reducir simplemente a: "yo hago lo que me dé la gana y punto"; que es lo que parece que realmente defiende el libertarismo.
No es cierto lo que tú dices. El libertarismo sí obligaría a que los individuos sean libres; dado que establece que no se debe atentar contra la libertad de otros individuos. Y si no se debe atentar contra la libertad de otros individuos, entonces tampoco se debe atentar contra la libertad propia que también es individual. Esto es la lógica. Lo demás es hacer lo que te dé la gana sin más. O sea, voluntarismo.
Por todo ello, los principios del libertarismo son contradictorios, inconsistentes y arbitrarios.
Entiendo que usted concede que es posible (empíricamente) poseer a otras personas y entiendo que usted está de acuerdo (con el libertarismo) en que es ilegítimo poseer a otras personas. Entiendo entonces que el desacuerdo está en si es posible y/o legítimo poseerse a uno mismo.
EliminarSi yo viviese aislado sería absurdo plantear si puedo o no poseerme a mí mismo, o si es ético que yo me posea a mí mismo, pero a la que emerjo en una sociedad en que pueden darse relaciones de sometimiento, subordinación, posesión material de personas... entonces tiene todo el sentido del mundo decir: "el único dueño legítimo de mi persona soy yo", en contraposición a "otros pueden legítimamente poseerme a mí".
Si usted aún no quiere conceder la posibilidad, digamos dialéctica, de poseerse a uno mismo, como mínimo estará de acuerdo en que es empíricamente viable la posesión de uno mismo. A pesar de toda lógica, si yo puedo venderle a usted en un mercado de esclavos, también usted puede comprarse a sí mismo, basta con que haga usted la puja mayor. En tanto que usted, además, puede venderse en cualidad de esclavo a un tercero, es perfectamente posible, empíricamente si se quiere, ser dueño y propiedad de uno mismo.
Por lo tanto superamos el primer escollo: es empíricamente posible poseerse a uno mismo.
Sobre si es dialécticamente (lógica, razonablemente...) posible poseerse a uno mismo yo, a priori, no tengo nada que decir. Me adhiero a una suerte de empirismo y asumo que es posible, es decir, que el lenguaje no puede preponderar sobre la experiencia.
El último obstáculo en nuestro desacuedo es sobre si es legítimo/ilegítimo poseerse a uno mismo y cuáles son los principios por los cuales esto es legítimo o ilegítimo, según el libertarismo (y, luego, si existen contradiciones internas entre este y otros principios libertarios).
Como ya dije, yo entiendo que la ética libertaria se basa en la maximización de la libertad negativa (no en la garantía de la propia libertad positiva) y, ciertamente, si yo me plantase en esa afirmación estaría fundamentando dogmáticamente la ética libertaria. Sea como fuere, si la ética libertaria se fundamenta en la máxima libertad negativa, entonces no existe contradicción con el hecho de que el libertarismo permita dañarse a uno mismo y, en esto, me atrevo a decir que usted no tiene más remedio que estar de acuerdo salvo que insista, erróneamente, en que el libertarismo se refiere a la libertad positiva cuando habla de libertad individual. Por lo tanto, creo que el problema no es una hipotética contradicción, sino que usted pone en cuestión la justificación del fundamento mismo: ¿en qué se fundamenta el principio de la maximización de la libertad negativa?
La maximización de la libertad negativa se fundamenta, como usted sabe, en el individualismo y, normalmente, si uno tira del hilo se acaba encontrando con postulados naturalistas sobre el individuo humano (el hombre tiene por naturaleza el deseo de ser autónomo). En mi opinión (porque soy un positivista escéptico del copón) el fundamento naturalista es, en parte y provisionalmente, dogmático (tanto como cualquier principio humanista). Aunque no está de más decir que hoy en día ya hay interesantes investigaciones en el campo de la psicología, biología evolutiva, etc. que empiezan a arrojar luz sobre la conducta social e individual del ser humano, es decir, la naturaleza humana desde la ciencia "dura" (la cual, en mi opinión, es la única vía para resolver esta suerte de dogmatismo provisional).
No es posible poseerse a uno mismo. Ya he explicado por qué es imposible. Es imposible a todos los niveles: empírico, moral, legal. Tú simplemente vuelves a afirmarlo; sin avalarlo con un razonamiento objetivo y sin refutar ninguno de mis argumentos.
EliminarUn esclavo no puede poseer propiedades porque para eso debería dejar de ser esclavo. Un esclavo es una propiedad; y la propiedad carece de derechos, por definición; también obviamente del derecho a la propiedad. La propiedad es un objeto, un recurso, del cual alguien se hace dueño: el propietario. Sólo pueden ser reconocidos como propietarios los individuos que no estén sometidos a la categoría de propiedad; y un esclavo pertenece a la categoría de propiedad.
Por muchos juegos dialécticos o retóricos que hagas, es imposible que alguien sea propietario y propiedad al mismo tiempo. Son dos nociones autoexcluyentes por lógica.
Asumir el principio de maximización de libertad negativa también implica que tú no puedes dañarte a ti mismo deliberadamente porque eso supondría un vulneración de mismo principio. Dañarte reduce tu capacidad para ser libre y eso contradice la maximización de libertad negativa. Si la libertad negativa implica estar libre de sometimiento y agresiones, entonces esto implica que no puedes hacerte daño a ti mismo intencionadamente.
Sobre "No es posible poseerse a uno mismo"
EliminarExisten casos documentados de esclavos que, en circunstancias favorables, pudieron ahorrar y comprar su propia libertad (Equiano, s. XVIII). Si antes eran poseídos por otras personas, ¿qué es lo que estaban comprando con SU dinero? ¡Resulta que el esclavo-cosa puede ahorrar (poseer otras cosas) y comprarse a sí mismo! Virtudes de las cosas (propiedades) animadas e inteligentes.
En la antiguedad son también conocidos casos de personas que se vendían a sí mismas como esclavas: ¿qué estaban dando en propiedad, sino a sí mismas? ¿y quién sería previamente, entonces, las propietarias de lo que vendían, sino ellas mismas?
Usted sigue insistiendo en que algo real, palpable, documentado... no es posible. Bueno, pues no será posible en su mundo interior. Yo prefiero atender a la realidad del asunto antes que a sus malabarismos racionalistas, que en este punto parecen informar más bien sobre el funcionamiento de las cosas.
Sobre "respetar la libertad negativa implica no dañarse a uno mismo":
La libertad negativa implica estar libre de sometimiento y agresiones EXTERNAS a uno mismo. Puesto que dañarse a uno mismo no es una agresión EXTERNA a uno mismo, la libertad negativa no limita el dañarse a uno mismo (en cualquier grado: fumar, tatuarse, suicidarse, extraerse órganos y regarlos o venderlos, amputarse arbitrariamente, etc.). La libertad negativa de uno mismo sólo obliga a los demás.
El hecho de que el principio de libertad negativa sólo regule las relaciones sociales humanas (y no constituya una especie de guía personal), de hecho, es su principal ventaja de cara a ser un principio del derecho en sociedades plurales, es decir, donde diversos individuos tienen distintas religiones, éticas, intereses, etc.
No quiera cargarse usted tan pronto el que posiblemente sea el principio más valioso que ha parido su amado liberalismo y que el libertarismo tiene a bien defender.
corrección 3er párrafo: *...más bien POCO sobre...
EliminarVamos a ver; en primer lugar, tú me estás hablando ahora sobre el ámbito jurídico. Pero mi argumentación se basa en hechos empíricos y principios lógicos. Estoy argumentado dentro del contexto filosófico. No he entrado siquiera a valorar el tema legislativo, que es otra categoría diferente.
EliminarEs decir, no distingues entre categorías básicas. No entiendes que lo que las leyes digan no demuestra absolutamente nada sobre la verdad de un hecho; ya sea empírica o lógica. Así no se puede debatir. Es como si yo argumento que la esclavitud es inmoral y tú me sales con que la esclavitud era legal en el siglo XVIII. ¿Y qué? ¿Qué tiene que ver que la esclavitud fuera legal con que sea moral? Nada.
No podemos debatir sobre nada. No diferencias ni respetas las categorías más elementales.
¿Por qué la libertad negativa tiene que estar limitada a las agresiones externas y no también a las agresiones internas? ¿Por qué esa discriminación? No razonas ni argumentas nada. Simplemente afirmas, dogmatizas.
El liberalismo y el libertarismo son dos doctrinas diferentes e incluso opuestas. Me remito a otro comentario que escribí en esta misma publicación; por no repetir otra vez lo mismo.
Por cierto, voy a tolerar tus gritos en este comentario como algo excepcional. La próxima vez que vuelvas a gritar, borro tu comentario sin aviso previo. Entiendo que la gente recurra a gritar cuando carece de argumentos; pero gritar no te da la razón, sólo demuestra desesperación.
Me sabe mal que haya usted interpretado las mayúsculas como gritos, mi intención era hacer énfasis y nada más. Utilizaré la negrita a partir de ahora para evitar malos entendidos. Además me abstendré de usar signos de exclamación. Añadiré que es innecesario que usted diga que yo carezco de argumentos y que muestro desesperación, porque podría ofenderme innecesariamente.
EliminarUsted ha dicho que "nadie puede poseerse a sí mismo" y que "un esclavo no puede tener propiedades". Yo le he mostrado que los esclavos pueden tener propiedades y que los esclavos (las personas) pueden comerciar consigo mismas, esto es, poseerse: esto no es una opinión mía, no es dogma de fe ni un salto lógico: es un hecho contrastado y presenciable incluso a día de hoy, que aún existe tráfico de esclavos, trata de blancas y situaciones análogas.
¿Por qué insiste usted en reivindicar conclusiones que, por muy lógicas y verdaderas que le parezcan, son verificablemente falsas? Si usted llegase a la conclusión lógica de que el calor se transmite del cuerpo más frío al más caliente y yo le mostrase en laboratorio que, de hecho, se transmite del más caliente al más frío, ¿no debería usted como mínimo dudar de que su argumentación está viciada de algún modo en lugar de quejarse de que yo no entiendo o estoy mezclando categorías? ¿El contexto filosófico, del que usted habla, es ajeno a la realidad?.
He supuesto que usted asumía la definición de libertad negativa habitual, pero veo que no es así y que, para mi sorpresa, pone en cuestión que yo esté empleando una definición ad hoc: yo no tengo ni el tiempo ni el interés en repetir el trabajo que ya han hecho otros sobre estas cuestiones fundamentales, entre ellos posiblemente el más básico sea el de Isaiah Berlin (un liberal, por cierto) en su ensayo "Dos conceptos de libertad": https://www.wiso.uni-hamburg.de/fileadmin/wiso_vwl/johannes/Ankuendigungen/Berlin_twoconceptsofliberty.pdf
Sea como fuere, su usted acepta que la definición de libertad negativa es esa (la consensuada por todos los filósofos políticos, menos usted) y que la libertad a la que se refieren los libertarios es la libertad negativa (que lo es: si les pregunta le dirán que lo es), entonces debe aceptar que no existe contradicción lógica entre la defensa y anhelo de maximización de tal libertad y el dañarse a uno mismo.
Si sigue insistiendo en no conceder como cierto el párrafo anterior empezaré a pensar que usted debate con su orgullo en la mano en lugar de con afán de entendimiento.
No, no es que yo haya "interpretado" las mayúsculas como gritos. Lo interpretas mal. Las mayúsculas dentro de una conversación equivalen a gritos. Es una normal universal; no una interpretación. Ya era así en la literatura muchísimo antes de que existiera internet y la informática, y la norma es vigente en cualquier soporte de comunicación.
EliminarEncima, resulta que sabes que se puede resaltar las palabras con negritas (o con cursivas) pero en lugar de recurrir a ello usas mayúscula. Increíble. Que a estas alturas tenga que estar explicando esto a alguien es como tener explicar el funcionamiento de sumar y restar números. Es demencial.
Los signos de exclamación son aceptables para remarcar una frase y no equivalen necesariamente a gritos. Aunque depende del contexto. Exclamar algo no es lo mismo que gritar.
Insisto de nuevo: es imposible dialogar ni debatir con personas que ni siquiera reconocen normas básicas sobre el diálogo. Imposible. No es culpa mía. Es algún defecto de educación o de personalidad.
Me da igual si te ofendes. Yo no te estoy ofendiendo. Estoy diciendo la verdad. Mi deber es decir la verdad y respetar a las personas. Pero no tengo el deber de ser amable con aquellas ideas o conductas que considero aberrantes.
Yo he demostrado que tanto a nivel empírico como lógico que la noción de que uno puede poseerse a sí mismo es absurda y falsa. Tú no has refutado nada de lo que yo he argumentado al respecto.
Lo único que has señalado es que la legislación (que es un ámbito puramente convencional y no está obligado a respetar la lógica ni los hechos) permitía en determina época que los esclavos tuvieran posesiones (dinero) o incluso que pudieran comprar su libertad. Pero te equivocas rotundamente al deducir de ello que los esclavos eran propietarios. No lo eran. Los propietarios de esos esclavos permitían, porque les interesaba, que algunos de sus esclavos pudieran administrarse posesiones de forma autónoma. Estás confundiendo el hecho de que los propietarios delegaran por mera voluntad una capacidad determinada a sus esclavos (que en cualquier momento podían revocar) con la noción del derecho a propiedad. No tienen nada que ver. Esa capacidad era una concesión que los propietarios delegaban a su esclavos. Pero los esclavos jamás eran considerados propietarios de nada, sino meros administradores de las (otras) posesiones de sus dueños. Salvo que fueran liberados de la condición de esclavitud, un esclavo jamás podía poseer nada y todo lo que administraba era propiedad de su dueño.
Además de todo esto, te repito que una ley juridica puede contradecir la lógica básica o los hechos manifiestos. La existencia de una ley no es prueba de nada a nivel argumental cuando se trata de esclarecer la verdad. La ley es sólo un instrumento social para imponer coactivamente determinadas normas de conducta, y nada más que esto.
Por tanto, lo que has deducido de ese hecho era una mera opinión y es una opinión errónea. Los esclavos no pueden ser propietarios tampoco a nivel legal. De lo contrario, no serían esclavos sino otra cosa.
La definición de libertad negativa que yo asumo es la misma que asume casi todo el mundo. No he cambiado nada de la definición. Sólo he señalado que respetar la lógica elemental obliga al individuo a respetar esa libertad también consigo mismo. Y así es. No refutas nada de mi argumento.
EliminarLa lógica es evidente. El problema de fondo es que la postura libertarista se basa en: "quiero hacer lo que me dé la gana sin que nadie más me diga lo que tengo que hacer". Y esto no tiene nada que ver con la lógica. Éste es el verdadero problema de fondo.
Mi único referente en este debate (o cualquier otro) es la verdad, la lógica, los hechos. No tengo intención de defender ninguna postura ideológica o doctrina. En cambio, todos los que habéis venido a comentar tenéis el propósito de defender una doctrina asumida porque os gusta o porque os interesa. Hay una diferencia abismal entre nosotros y por eso es imposible el entendimiento.
El entendimiento no es imposible, sólo es necesaria predisposición y paciencia por parte de todos. Sobre todo paciencia para ponerse de acuerdo en las definiciones de los términos que se emplean. Además, yo soy tan amigo de unos (libertarios) como de otros (liberales), no creo que nadie me pueda acusar de sectario, fundamentalista o intolerante: en todo caso me equivocaré como todo el mundo, a lo cual no tengo ningún problema en corregirme. Por cierto, creo que puse en mayúsculas, literalmente, 2-3 palabras.
EliminarVeo que insiste en no conceder como cierto que el libertarismo, en su defensa de la libertad negativa, no contradice ningún principio lógico. Como a mí me parece muy claro que no contradice ningún principio lógico, trataré de enfrentar la cuestión desde el principio, paso a paso, y ya me dirá usted dónde ve mi error.
Por partes, la contradicción lógica que usted ve (si me equivoco me lo dice), es la siguiente:
- el libertarismo dice respetar la autodeterminación del invidiuo, la libertad para autodeterminarse y decidir sobre su vida
- el libertarismo acepta que la autoderminación puede ser usada para destruirse a sí misma, es decir, para destruir deliberadamente esa libertad
- el libertarismo se contradice porque lo segundo contradice lo primero.
En fin, no tenemos más remedio que ponernos de acuerdo en alguna definición de libertad. La definición de libertad que emplean los libertarios es la de libertad negativa, que es una definición exclusivamente política de libertad, por ejemplo, según Berlin:
Actual libremente es "actuar sin interferencia de otros seres humanos", esto es: actuar sin coacción. Coacción definida como: "actuación deliberada de otro ser humano sobre el area en que yo puedo actuar". Expresado de otro modo: "Se carece de libertad si a uno se le impide alcanzar sus objetivos por parte de otros seres humanos".
Como usted dice que asume la definición de libertad negativa que asume todo el mundo y yo le acabo de citar la definición común, pero no quiero dar por sentado que usted la acepta, así que respóndame, si le parece, a las siguientes preguntas (se las numero y creo que convendría que usted numerase sus respuestas, respectivamente):
1) ¿Concede que la doctrina libertaria, cuando habla de libertad, se refiere a la libertad negativa?
2) ¿Concede que la definición de libertad negativa es, en pocas palabras: "actuar sin interferencia de otros seres humanos"?
Suponiendo que responda Sí y Sí. Entonces debe usted corregir la primera premisa de su argumentación, en concreto, debe corregir la premisa:
- El libertarismo dice respetar la autodeterminación del individuo, la libertad para autodeterminarse y decidir sobre su vida.
Sustituyéndola y reformulando su argumentación:
- El libertarismo dice respetar la libertad del individuo entendida como "actuar sin interferencia de otros seres humanos"
- A continuación: El libertarismo acepta que en un estado de ausencia de interferencia por parte de otros seres humanos, uno pueda dañarse a sí mismo.
- Puesto que dañarse a uno mismo no implica interferencia de otros seres humanos, (2) no entra en contradicción con (1).
3) ¿Está de acuerdo con que si response afirmativamente la primera y la segunda preguntas, entonces se ha de reformular su argumentación tal como yo lo he hecho y que, por tanto, no existe contradicción interna de los principios de la doctrina libertaria?
Pues nada, le agradecería que respondiese a 1), 2) y 3) al principio de su siguiente respuesta y que, a continuación, justificase sus respuestas (sobretodo si son una negativa).
¿Te has pensado que eres alguna clase de profesor y que esto es un examen?
EliminarEn absoluto. La numeración es para que los dos sepamos dónde estamos en desacuerdo. No hay respuestas buenas o malas, ni yo le voy a poner nota. Si fuera una conversación sencillamente me pararía en el primer punto y le preguntaría ¿está usted de acuerdo hasta aquí? Nada más que eso (por otro lado, es evidente que se trata de nada más que eso).
EliminarYo veo un problema esencial en tu argumentación. A ver si te lo puedo señalar de forma concisa.
EliminarEl problema es que tú eliges como criterio la supuesta definición del libertarismo. Es decir, tu criterio de corrección se basa en una definición terminológica. Yo en principio no tengo nada que objetar a esa definición. Ni siquiera la estoy discutiendo. Ni tengo intención de reformarla.
En cambio, mi criterio de corrección no es la definición sino que es la lógica, y los hechos empíricos. Es decir, yo no estoy discutiendo la definición del término. Lo que estoy analizando es si esa definición sería correcta de acuerdo a la lógica y los hechos. Esto es: si la definición respeta la lógica elemental y no contradice los hechos empíricos probados. De esto es de lo que trata mi ensayo. Son dos cuestiones distintas.
No sé si alcanzas a comprender la diferencia. Creo que no, porque tu argumento se basa en alegar que la definición de libertarismo no contradice la definición de libertarismo. Eso es un argumento circular.
Pongamos como ejemplo que la definición del comunismo moderno fuera que se debe reconocer y buscar la libertad de los hombres debiendo estar obligados a trabajar como funcionarios del Estado. No es la definición exacta pero creo que se asemeja bastante. Ahora, podemos discutir si la definición es correcta de acuerda al significado establecido del concepto de comunismo o podemos analizar si es una definición correcta de acuerdo a la lógica. Parece evidente que esa definición atenta contra la lógica porque obligar a los hombres a trabajar para el Estado es una contradicción con el hecho de reconocerlos como individuos libres. El contenido de la definición sería incoherente según la lógica.
Del mismo modo si la doctrina del libertarismo tiene como valor fundamental la libertad negativa del individuo, resulta lógicamente contradictorio que la doctrina afirme que los demás deben respetar esa libertad en nosotros pero que acepte al mismo tiempo que uno mismo pueda atentar en contra de su propia libertad o que uno mismo pueda dar consentimiento para que otro atenten contra dicha libertad.
Ése es el primer error que señalé en mi escrito; además del error empírico y del error moral.
Tú pretendes alegar que la definición de la doctrina del libertarismo restringe esa intromisión sobre la libertad negativa a la voluntad de "otros" pero no a la de uno mismo. Pero aunque fuera la definición correcta daría lo mismo, porque igualmente seguiría atentando con la coherencia lógica.
Entre uno mismo y los otros hay una diferencia empírica pero no lógica. Somos empíricamente individuos distintos, obviamente. Cada uno es un ser material singular y distinto de los otros. Pero todos los individuos somos iguales en el hecho mismo de ser individuos, de ser sujetos. Por tanto, aquella discriminación entre uno mismo y los otros sería arbitraria porque no se basa en ninguna distinción lógica. Y así el libertarismo se fundamenta en un error de lógica. Un error que estaría en la raíz misma de todas las discriminaciones morales arbitrarias.
¿Podrías decirme la diferencia de entre liberalismo y libertarismo? He buscado en blogs pero cada uno tiene una definición diferente.
ResponderEliminarGracias!
La diferencia es la misma que hay entre el liberalismo y el anarquismo. El libertarismo se basa en el anarquismo; es un tipo de anarquismo.
EliminarEn España, es habitual que los anarquistas se autodenominen libertarios, y encontramos este término ya en los años 30 del siglo XX. Ese término ha sido siempre usado por anarquistas:
«Un español de paso por Costa Rica se sorprendió al ver que aquí existe un partido denominado “Movimiento Libertario”, ya que en su tierra –decía- el libertarismo siempre ha sido popularmente sinónimo de anarquismo y no constituye un partido político porque esta filosofía no aspira al poder, sino, con sus ideales, inspira una forma de vida donde precisamente lo que no debe existir es el Estado»
http://semanariouniversidad.ucr.cr/opinion/liberalismo-libertarismo-y-anarquismo/
La diferencia es que estos libertarios que también se dicen "liberales" son anarquistas de derechas que defienden el individualismo y el capitalismo; lo cual los diferencia de los otros anarquistas/libertarios que en su mayoría se inclinan por posturas colectivistas, de izquierda y próximas al socialismo. El término correcto para denominarlos sería libertaristas.
La confusión proviene del uso del término "libertad". Dado que los libertaristas dicen defender la libertad entonces dicen que defienden el "liberalismo", pero no hay ninguna doctrina política que no proclame la libertad como uno de sus principios. Incluso el fascismo habla a menudo de la libertad. Pero el fascismo no es liberalismo. La confusión promovida por estos libertarios/anarquistas [libertaristas] es tremenda.
Lo cierto es que no hay ninguna conexión entre el libertarismo y el liberalismo. De hecho, lo que los libertaristas defienden es un atentado contra el liberalismo. El libertarismo es una doctrina anarquista que ataca al Estado, que es uno de los pilares fundamentales del liberalismo. Este ataque sólo existe en el anarquismo:
«Una cosa ha de quedar clara: el liberalismo no es anarquismo, no persigue la abolición del Estado, [...] Todo lo contrario, el liberalismo defiende como principio irrenunciable la libertad y la responsabilidad individual, la cual es imposible si no existe un respeto sagrado a la propiedad privada. En una sociedad anarquista, ambos, libertad y propiedad, junto con la vida, el otro derecho inherente a la persona, estarían amenazados constantemente por la actuación de otros miembros de la sociedad, quienes no encontrarían obstáculo alguno para violarlas. Es lógica, pues, la necesidad de un Estado que ejerza la protección de la vida, la libertad y la propiedad privada a través de un sistema legal que los garantice y del monopolio legítimo de la fuerza, que tenga la capacidad suficiente para articular los medios para que las libertades se ejerzan sin abusar de las de terceros.»
http://blogdelosliberales.blogspot.com.es/2010/01/liberalismo-o-ley-de-la-selva.html
El libertarismo habla de la propiedad (privada) como "entidad sagrada" y un derecho inviolable. Mientras que el liberalismo jamás ha fanatizado a la propiedad. El liberalismo reconoce sin duda el derecho a la propiedad privada como un derecho básico pero este derecho no puede contradecir el respeto a la persona y los demás derechos, ni la existencia del Estado como institución garantista:
«De ahí el cimiento de la sociedad política, establecido vía la cooperación y competencia entre individuos; el Estado surge como proceso de dicho actuar humano y se legitima dada una misión primordial: la protección equitativa de los derechos naturales del hombre libre, es decir, su vida y su propiedad. Hasta aquí podría incluso afirmarse que Locke era un proto-libertario, pero no es así. Al igual que otras figuras del liberalismo clásico – siendo quizá el más famoso Adam Smith- Locke nunca fue un “absolutista” de los derechos de propiedad. En su perspectiva, aunado a los derechos económicos existen también derechos políticos inalienables al hombre. En conjunto, derechos económicos y políticos, son los grandes pilares de la libertad del hombre.»
Eliminarhttp://www.paradigmas.mx/debatiendo-ideologias-hayek-rothbard-y-rawls/
Los libertaristas a menudo dicen que ellos representan "el verdadero liberalismo" en contra de lo que llaman "liberalismo clásico" o liberalismo de izquierdas. Para ellos, Friedrich Hayek es un izquierdista. La verdad es que no existe ningún punto en común y sólo hay conflicto permanente entre libertarismo y liberalismo. Sólo tienen en común la referencia a la libertad; es decir, nada.
Es cierto que hay una corriente dentro del liberalismo que aboga porque el Estado no intervenga para nada en economía. Esta corriente denominada liberalismo libertario no es el libertarismo al que yo me refiero que es anarquista. Si bien las ideas defendidas por Mises, y otros como Nozick, ha sido usada por los libertaristas para defender la inexistencia del Estado en cualquier ámbito de la vida, es decir, el anarquismo. Pero el propio Mises aclara este punto:
“El liberalismo no es anarquismo, ni tiene nada que ver con el anarquismo. El liberal entiende bastante claramente que sin el recurso de la compulsión, la existencia de la sociedad estaría en peligro y que detrás de las reglas de conducta cuya observación es necesaria para asegurar la pacífica cooperación humana debe estar la amenaza de la fuerza sin el cual la totalidad del edificio de la sociedad continuamente estaría a la merced de cualquiera de sus miembros.”
“El gobierno en sí no sólo no es un mal, sino que es la institución más necesaria y benéfica, dado que sin ella no podría desarrollarse y preservarse una cooperación social en el tiempo."
http://archipielagolibertad.org/upload/files2/007%20Estado%20de%20derecho/7.7%20%BFSin%20Estado/0009%20Cachanosky%20-%20Los%20limites%20del%20anarcocapitalismo.pdf
El liberalismo se basa en la razón, en la universalidad, en el concepto objetivo de justicia. El libertarismo se basa en el voluntarismo, es decir, en la primacía de la voluntad individual sobre cualquier otro criterio. El liberalismo es racional y racionalista; mientras que el libertarismo es irracional e irracionalista:
«"Como hijo de la Modernidad y la Ilustración, el liberalismo nada en las aguas de una corriente que endiosa a la Razón y la coloca dogmáticamente en el epicentro de la vida del hombre: como herramienta predilecta en la búsqueda de la supuesta Verdad y en el dominio de la naturaleza, para procurar el progreso y la felicidad humanos."»
No hay posibilidad de conciliación, dado que si en efecto los libertaristas se basan en el voluntarismo, como yo señalo, entonces no aceptarán criterios objetivos, y eso quiere decir que ellos consideran legítimo usar las palabras como les dé la gana en virtud de la soberanía absoluta de su voluntad. Y así estamos.
Su razonamiento empírico es parcialmente correcto: yo soy mi cuerpo y mi alma. No obstante, desde el mismo momento de mi nacimiento no puedo ir a ninguna parte sin mi cuerpo, por tanto, no hace falta reconocer un derecho de propiedad pues el cuerpo me acompañará durante toda mi existencia. De este modo, es del todo absurdo discutir si yo soy mi cuerpo o si soy propietario del mismo. Soy ambas cosas y a efectos prácticos da igual considerarme como propietario (tendría facultad universal de disposición sobre el mismo en base al derecho de propiedad) o entender que mi cuerpo y yo somos lo mismo y, de ese modo, ser apto para asumir todas las consecuencias de mis actos.
ResponderEliminarReorganizando lo anterior, da igual que yo sea mi cuerpo o que mi cuerpo sea mío. La discusión radica en qué puedo hacer y qué no. Asumamos que "yo soy mi cuerpo". En tal caso, soy libre de realizar todas aquellas acciones que ayuden a remover un sentimiento de desasosiego en mi existencia y a buscar mi felicidad mientras no vulnere la libertad de nadie para desarrollar su proyecto vital. Obviamente, seré yo, y nada más que yo, quien determine qué es bueno o malo para mí (mi cuerpo). ¿Acaso sabe Ud. o el Estado qué es lo mejor para mi cuerpo? En caso de saberlo, ¿debo estar obligado a seguir sus directrices? ¿Por qué debo renunciar a la felicidad que me reporta desgastar mi cuerpo en actividades arriesgadas para mi salud pero que me hacen sentir vivo?
La construcción de su razonamiento se cae desde la base. Si Ud. asume que somos nuestro cuerpo, ya no podemos hablar de nada más que de la libertad del individuo. Como Ud. dice, no se debe vulnerar el principio básico de identidad. Si cuerpo e individuo son la misma cosa, no se puede acusar al "libertarismo" de ser incoherente. Libertad del individuo para ser responsable de todas sus acciones. Libertad plena siempre que no se vulnere la libertad de otro individuo. Libertad, claro está, de cada individuo para usar y disfrutar su cuerpo como mejor estime conveniente.
PD. Si el término "usufructo" le lleva a pensar que sostengo la tesis de que somos propietarios de nuestro cuerpo, puede cambiar la expresión por "hacer con su vida lo que estime más oportuno. Inclusive acabar con ella" (como comentaba, implican lo mismo). No hay acto más libre que el suicidio. Quien lo considere inmoral debería pensar si él dispone de mayor información que el suicida para valorar el móvil de dicho acto.
ResponderEliminar
Mi razonamiento es totalmente correcto; no parcialmente.
EliminarEl alma no existe. No tienes ninguna prueba de que exista tal cosa. Por tanto, tu premisa no es válida; es fantasía. No se puede argumentar ni debatir con fantasías.
Necesitas urgentemente ponerte al día en ciencia, en neurociencia, y abandonar esa visión mágica y trasnochada del "alma". Te recomiendo encarecidamente leer a Antonio Damasio y Rodolfo Llinás, entre otros científicos, que demuestran que la mente es un producto cerebral.
No hay ninguna diferencia entre tú y tu cuerpo. Lo que tú percibes como tu cuerpo es un producto del cerebro. Es un esquema mental construido por las conexiones neuronales de tu cerebro.
¿Cómo "se cae" mi razonamiento? No has aportando ningún argumento que refute nada de lo que yo haya dicho. Todo lo dices no es más que una retahíla de afirmaciones sin conexión entre ellas. Es un discurso lleno de retórica sin argumentación por ninguna parte.
El titulo del post carace de sentido, no veo la refutación logica por ninguna parte. Por otro lado partes de una premisa erronea que es el concepto de derecho, como derecho positivo. Una persona no tiene derecho a vivir, ya que la vida es algo transitorio, por contra lo que tiene derecho es a que otra persona NO le arrebate la vida o cualquier otra cosa que le pertenezca (derecho negativo). Pero este derecho, puesto que es negativo, limita su aplicación a la interactuación de al menos dos individuos, Yo tengo derecho a que usted no me mate, por ejemplo. Pero no tengo derecho a que no me mate un terremoto una inundación o un animal salvaje puesto que estos están fuera del ambito del derecho. En lo referente al individuo consigo mismo tampoco es aplicable el derecho tal y como lo entendemos entre dos o mas individuos, presisamente por aplicación del principio de identidad que mencionas (A=A) y es el unico ambito donde el derecho positivo tiene cabida.
ResponderEliminarSi entramos en el campo de la moral y suponiendo que acudes a una visión de lo moral digamos "Randiana", puedes argumentar que lo moral es lo que te conduce a preservar tu vida, por lo que cualquier cosa que hagas que suponga un perjuicio para tu existencia podria considerarse inmoral y hasta ahí podemos estar algo de acuerdo. Pero la moral o el acto moral requiere de la libre voluntad sin la cual no puede existir, de modo que si recurrimos a un agente externo al individuo (Estado p.e,) para imponer la moral mediante la perversión del derecho positivo el sistema es inmoral. Como decía Rand un mandamiento moral es una contradicción.
Por ultimo y enlazando con el principio para poder llamar a tu post refutación debes utilizar la logica formal, bien mediante reducción al absurdo o cualquier otro metodo, identificando previamente las premisas, de ese modo sería mas facil discutir y se daría cuenta de que algunos conceptos básicos como el de ser humano, derecho o libertad pueden estar bastante sesgados segun quien los emplee y para qué. Tambien sería bueno estudiar un poco , leer por ejemplo algo de Locke, Rothbard o Hoppe por citar a algunos cronologicamente. Para definir el libertarismo con un poco mas de conocimiento. La observación, el estudio, la logica, un poco de método científico también nunca están de más.
Esto no es un "post". Esto es una entrada, un ensayo, un artículo, una nota, un texto,... No estamos hablando en inglés. Eso para empezar.
EliminarSi tú no ves la refutación lógica, eso no significa que no esté ahí. Significa simplemente que no la ves.
No parto del concepto de derecho como derecho positivo o jurídico, sino que me refiero únicamente al concepto de derecho en sentido moral. Toda la argumentación es filosófica-moral. Tengo la impresión que no has comprendido nada de lo que he explicado.
Que la vida sea algo transitorio no implica que uno no tenga derecho de la vida. No hay ninguna conexión lógica entre tu premisa y tu conclusión.
El derecho a la vida es una manera no-consecuencialista de proteger el interés en vivir. Este derecho implica la obligación de respetar el interés en vivir del individuo. Y esa obligación atañe a todos los que son conscientes y responsables de sus actos, es decir, a los agentes morales. Y si el que posee ese derecho, además de ser un sujeto de derechos, es también un agente moral entonces tiene la obligación de respetar ese derecho también para sí mismo. Ningún argumento justifica violar un derecho sólo porque el poseedor de ese derecho sea yo mismo.
No acudo a ninguna visión moral "randiana" ni nada parecido. Creo que juzgas a partir de demasiados presupuestos y prejuicios que te impiden valorar mi argumentación con un mínimo de imparcialidad. Lo único que yo hago es razonar a partir de una serie de datos básicos y de principios lógicos; y no defiendo ninguna doctrina.
Un mandamiento moral no es una contradicción. Todo lo contrario. La moral consiste precisamente en obligaciones y deberes.
En mi refutación he usado la lógica formal y he identificado muy claramente las premisas. Imposible ser más claro. De todos modos, esos conceptos que señalas ni siquiera forman parte de mi argumentación y mi análisis.
Decirme que sería bueno estudiar o leer tampoco es un argumento. Es más bien una falacia ad-hominen. Quizás tú deberías estudiar a esos autores que mencionas, dado que, para empezar, Locke no defiende el libertarismo sino el liberalismo. Son dos cosas muy distintas. Si no sabes distinguirlas tal vez deberías ser tú quien se pusiera a estudiar en lugar de dar consejitos a otros.
No hay argumentos ni objeciones consistentes ni nada parecido a una respuesta racional en tu comentario.
Bueno, como pasó mucho tiempo no se si sostienes lo mismo, en cualquier caso, para navegantes, expongo un poco.
ResponderEliminarRespecto al punto 1: "..Como no hay diferencia esencial entre nuestro cuerpo y nosotros mismos..."
Sí que creo que hay diferencia esencial entre 'persona'(1) y 'cuerpo'(2), Aunque no pueda existir (1) sin (2), sí que puede existir (2) sin (1), los muertos por ejemplo. Estaremos de acuerdo en que los muertos ya no son (1), pero sí son (2). Empiricamente, podemos decir que (1) es el resultado de las conexiones cerebrales/nerviosas/neurológicas/etc... para generar una personalidad y que (2) es el soporte material. Creo que si (1) no tiene toda la legitimidad de qué hacer con (2) según sus intereses, se estarían vulnerando sus derechos más básicos.
Respecto al 2º punto:
"Es lógicamente contradictorio..."
El problema con este punto es que se mezcla una decisión personal, como pueda ser el suicidio, que no afecta a otra persona más que a uno mismo, con un criterio para regular la convivencia, las relaciones entre individuos; es decir, un criterio comunitario como es la moralidad. En las decisiones personales no tiene cabida la moralidad porque por definición la moralidad hace alusión a la interacción entre unos y otros.
La premisa "el fundamento básico de la moralidad es la libertad del individuo para autodeterminarse," significa precisamente que nadie externo a tí (moralidad) puede impedirte autodeterminarte. Imaginemos que alguien tuviera el poder de morir/desaparecer con un chasquido de dedos, sin que nadie tuviera luego que molestarse en recoger el cuerpo. No me parece que haya nada que legitime una injerencia externa en esa decisión privada.
Sobre el punto 3:
"Es inmoral porque si la..."
Volviendo al caso del suicidio, el principio de identidad ya parece no tener razón de ser porque una persona que quiere morir ya no tiene interés en vivir. Por tanto, al querer suicidarse, no parece que tenga sentido aludir a que estaría vulnerando su derecho a vivir. A mi entender la base de los derechos fundamentales son los intereses básicos. Si no hay un interés, no parece razonable hablar de un derecho. Por tanto no se está violando A=A porque no existe tal.
Saludos.
Tu primer punto se basa en una confusión semántica. Cuando yo hablo del cuerpo de una persona me refiero obviamente a un organismo vivo sintiente. Esto es obvio porque sin organismo vivo sintiente no puede haber persona. Por tanto, tu aclaración es irrelevante al caso. Por otro lado, el cuerpo no es el "soporte material" de la persona. Eso es una concepción dualista y anticientífica que se remonta a la idea del alma espiritual separada del cuerpo material. La persona es una proyección neurológica del cerebro —o de un sistema nervioso centralizado— que genera la subjetividad acompañada de un esquema mental que denominamos "cuerpo". Lo que nosotros llamamos "cuerpo" es una proyección neuronal que el cerebro ha creado para sostener la supervivencia y desarrollo del organismo vivo. Por tanto, no puede haber diferencia esencial entre la persona y el cuerpo porque el cuerpo es precisamente el contenido de la persona. No puede haber personalidad sin cuerpo. Es decir, no existe el cuerpo y por otro lado aparte las sensaciones, emociones, deseos, y demás fenómenos conscientes, sino que el cuerpo mismo es otro fenómeno mental del cerebro, junto con el resto de experiencias conscientes.
EliminarTe sugiero que leas el trabajo de neurocientíficos como Rodolfo Llinás, Antonio Damasio y Derek Denton, entre otros, que explican cómo se produce la conciencia, y abandones esa concepción dualista y anticientífica de la personalidad.
Uno tendrá la legitimidad de hacer con sus intereses aquello que entre dentro de los límites de la moral. Si uno tiene la intención de violar los derechos de un individuo entonces no tiene ninguna legitimidad para actuar así. Quizás confundes el capricho subjetivo con los derechos.
El solo hecho de que una intención sea una "decisión personal" no convierte automáticamente a esa intención en un hecho legítimo desde el punto de vista moral. Tampoco le aporta legitimidad el hecho de que únicamente afectara a uno mismo. Aparte de que el suicidio puede afectar directamente a otros aparte del propio suicidado; por ejemplo, a los familiares.
La moral no es un criterio comunitario sino que es un criterio lógico. No es fruto del acuerdo social sino que es un producto de la razón. Aparte, la moral no se atiene sólo a las relaciones entre individuos sino también a la conducta del individuo respecto de sí mismo. Es absurdo discriminar a la propia persona de la moral. Es tan irracional como discriminar a otros individuos de la comunidad moral alegando que ellos no son nosotros.
EliminarAunque fuera cierto que la moral se fundamenta en la autodeterminación del individuo, este fundamento no justificaría hacer cualquier cosa respecto de uno mismo sólo porque así se decida subjetivamente. Eso confundiría la libertad con el libertinaje, es decir, la posibilidad de poder actuar voluntariamente con el simple hecho de hacer lo que te dé la gana sólo porque te dé la gana sin ninguna clase de límite ni racionalidad. Como ya señalé en el ensayo, la libertad no sirve como excusa para destruir la libertad, así que no tenemos libertad legítima para destruir deliberadamente nuestra propia libertad. Por esto, entre otras razones, la esclavitud es ilegítima en cualquier forma o modo, aunque supuestamente se realizara de forma voluntaria por parte del esclavizado.
Por la misma razón, tampoco tenemos legitimidad moral para destruirnos a nosotros mismos de forma intencionada sólo porque nos surga ese deseo. Esta acción atenta contra los derechos individuales y contra el valor inherente del individuo. Es simplemente otra forma del asesinato. Que el autor sea uno mismo no hace que deje de ser un asesinato. El capricho no se antepone a la ética.
Que una persona tenga el deseo de morir no equivale a que no tenga el interés en vivir. Lo que argumentas es una falacia. Uno puede querer morir circunstacialmente porque se encuentre en una situación deplorable —por ejemplo, una grave enfermedad terminal y degradante— de la que desea salir y no encuentra otra forma de hacerlo que mediante la muerte. No es que haya perdido el interés en vivir; lo que sucede es que hay un conflicto con otros intereses como, por ejemplo, el de disfrutar de cierto bienestar. El interés en vivir nunca puede desaparecer. El interés en vivir es inherente a la conciencia. La capacidad de sentir surge como un fenómeno fisiológico para asegurar la supervivencia del organismo vivo. La conciencia es una herramienta biológica para la continuidad del ser vivo animal. No tiene ningún sentido señalar que puede ocurrir tal cosa como perder el interés en vivir, cuando este interés es parte constitutiva de la conciencia. Mientras haya conciencia habrá interés en vivir.
El deseo de morir surge siempre de una insatisfacción con las condiciones de la existencia, cuando éstan entran en conflicto con el bienestar, la automonía, o los proyectos de vida del sujeto. Cuando el individuo entiende que las condiciones materiales atentan contra esos otros intereses—y no concibe que haya forma de cambiar esto— entonces surge la intención de matarse. Sin embargo, este solo deseo no justifica violar el derecho a la propia vida. El derecho a la vida no se anula sólo porque uno lo decida subjetivamente. Si tenemos un derecho a la vida entonces tenemos que respetar ese derecho en nosotros mismos del mismo modo que debemos respetarlo en los demás.
Un ser independiente que vive aislado de los demás es al mismo tiempo dueño de sí mismo y solo él y su conciencia de bienestar le haría reconsiderar o no un acto que atente contra él mismo. En tal caso es un individuo que por el hecho de estar sólo, a nadie afecta lo que le suceda, lo que decida o no hacer. Cuando el hombre después de eventos aislados comenzó a descubrir que dejando semillas en un suelo húmedo de éstas salían plantas que luego de crecer le proveían muchos más granos o lo que fuera que produjera, luego de darse cuenta de que al capturar y dejar para después a algún animal de éste salían una y varias crías que al crecer le podrían proveer de más carne que de un solo animal, con todo eso logró entender que podría dejar de ser nómada y establecerse en un lugar de manera sedentaria. Comenzó a entender que debía cuidar la integridad de sus plantas y de sus animales. Si observaba que tras el confinamiento se hacían daño lo evitaba. Al volverse sedentarios dejaron de abandonar sus cuerpos al morir por alguna enfermedad o ataque. Hubo necesidad de tener un lugar estable y duradero donde vivir, las cuevas y cualquier árbol ya no eran suficientes. La familia creció. Dejaron de tener parejas múltiples a solo una estable. Aumentó y se reforzó el vínculo familiar. Comenzó a importar el apoyo, la solidaridad y sobre todo la relación e interacción entre los miembros del asentamiento. La interacción y necesidades hicieron que las tareas se diversificaran de acuerdo a su habilidad. El florecimiento trajo consigo tanto las envidias internas como de otros asentamientos. Luego al crecer los asentamientos fue necesario que el número de personas ocupadas en la seguridad aumentara proporcionalmente. Se tuvieron que desarrollar formas comunes de comunicación y por supuesto de normas para la sana convivencia. Se tuvieron que implementar sanciones. Si alguien salía y no regresaba pronto ya no se le dejaba a su entera libertad, podría haberle pasado algo, surgió la preocupación no solo de los miembros del asentamiento, sino en mucho mayor medida de su familia, de su esposa de sus hijos. Los hijos al igual que en el mundo animal fueron los que más cuidados y protección tenían. Se atendía si estaban enfermos, se procuraba su alimentación. Cada asentamiento dependía entonces de una ayuda, protección y procuración de sus integrantes, ser sociables los convirtió en una sociedad, nos convirtió en una sociedad. Mi hijo no es libre de ir a donde quiera porque depende de mí para su sustento y seguridad. Tiene tareas que realizar por lo tanto no es dueño de su tiempo de manera absoluta porque vivimos en una microsociedad que se llama familia de la cual todos los integrantes dependemos. Podría optar por dañarme en un arrebato pero no soy un individuo independiente en todos los sentidos, tengo una dependencia familiar, una dependencia emocional, una dependencia social. Al dañarme en mi persona estoy dañando en muchos sentidos a mi propia familia y a mi sociedad. Se pondría en riesgo su seguridad, la parte emocional, el aspecto económico, los compromisos que ya he pactado y que adeudo, a esos les causaría daño y perjuicio. Para evitar mucho de ese daño es que las normas de convivencia incluyen la integridad personal. Sé que es mucho lo que he expuesto, tal vez pareciera que iba por otro lado pero creo que al final la idea se entiende. Si alguien quiere ser dueño absoluto de su voluntad, sin que nadie pueda reprocharle, entonces debe convertirse en un ermitaño, totalmente independiente. Al leer muchos otros aspectos expuestos por los libertarios debo admitir que muchos de sus planteamientos me parecen muy adecuados, en otros casos un poco exagerados. Se han generado aristas en las formas de regirse las sociedades. Unas, monarquías absolutistas, otras capitalistas y en contraparte los socialistas-comunistas. Surge ahora una nueva corriente llamada Libertarismo, buena en gran medida pero que tiene tintes extremos, es decir, no de libertad sino de libertinaje.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con lo que comenta el autor, el libertarismo está lleno de ideas cuestionables.
ResponderEliminar